Se trata se un novedoso sistema anticonceptivo que busca terminar con los
problemas de tamaños.

Para usar el novedoso anticonceptivo en aerosol, debe rociarse sobre el pene y esperar unos segundos a que seque. Al entrar en contacto con el aire, se convierte en una especie de capa gelatinosa al efectuar la penetración.
Cuando el hombre eyacula, el aerosol entra contacto con el semen y vuelve a convertirse a su estado líquido, liberando una droga encargada de atacar el VIH SIDA, por lo que ni los espermatozoides prosperan para fecundar el óvulo, ni ningún virus puede infectar a la pareja.
Según indican los investigadores, la principal ventaja de este desarrollo es que se anularían las complicaciones por colocación, eliminando el riesgo de que se rompa.
Además de que representa una opción cómoda y fácil de llevar, lo que dejará de lado las excusas para no emplear un método anticonceptivo en las relaciones sexuales.
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