"Se encuentra bajo la custodia policial"
Tras el rescate, la multitud quería agredirlo,
unos contentos porque salvó la vida y otros vociferando maldiciones porque no
se tiró.


Una vez el hombre a salvo, la multitud sobrepasó la barrera policial y lo agredió a golpes, lo que provocó un conato de enfrentamiento entre las autoridades y los agresores.
El potencial suicida comenzó las amenazas de lanzarse alrededor de las 4:00 de la tarde y no fue si no hasta casi dos horas después cuando los bomberos lograron rescatarlo. La Policía se lo llevó para fines de detención.
El desconocido, quien portaba una botella de ron, se mantuvo de pie sobre una de la barandilla del puente haciendo equilibrio para evitar que la brisa lo arrastre hasta el río Ozama.
Un gran taponamiento se produjo en la zona debido a que los conductores se detuvieron en medio del puente a observar la escena, tanto sobre el puente como debajo.
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