Escrito por: Joseph Caceres
03:08 PM - 2 abril, SANTO DOMINGO, RD *-. El extendido tiempo en estos menesteres nos ha permitido ver como cada generación de cantantes y músicos a quienes les ha pasado su "cuarto de hora", trata de descalificar a la que llega.
Cuando Johnny Ventura hizo su aparición en el ambiente en los años 60 rompiendo con el esquema de las orquestas de salón como La Santa Cecilia, la José Reyes, Primitivo Santos, Antonio Morel, las críticas no se hicieron esperar, ante el estilo desenfadado que le imprimió al ritmo a partir de su célebre "Cuabero".
Ventura destronó a Joseíto y estableció una competencia con Felix del Rosario y sus Magos del Ritmo, hasta la aparición de Wilfrido Vargas. Como recordarán Wilfrido causó estragos con el aceleramiento que le dio a su música, provocando controversias con los músicos tradicionales, que le acusaban de que no tocaba merengue.
Joseíto lo bautizó como "fuñemengue" de manera despectiva. Surgió Pochi Familia con su estilo de la Coco Band, y contra él se volcaron entonces los ataques de quienes le antecedieron. Surgió Omega y los intérpretes del denominado "merengue de calle" y también fueron "triturados" por los llamados "viejos, desfasados" delmerengue tradicional. Ahora está de moda el "dembow", y los mismos que fueron criticados antes, son los que afilan hacha y lanzan críticas en contra de esa modalidad que tanto gusta a la juventud.
"El dembow" no es música dice Wilfrido, criterio que rechaza Sergio Vargas.Lo de los músicos condenando y rechazando las expresiones de las nuevas generaciones es lo que más se parece a la cadena alimenticia, que en definitiva es lo que permite la supervivencia de la especie. Siempre se comen unos a otros....
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