Tras competir en la primera vuelta, el ex presidente y el economista abandonaron el misterio e hicieron públicas las posturas de sus partidos.
*Negaron que existan acuerdos de gobierno con las fuerzas en competencia.
10:15 PM Mayo, El Perú *-. A menos de diez días de los comicios y en momentos en que las encuestas muestran paridad, Keiko Fujimori amaneció con una sonrisa este jueves. El ex ministro de Economía y tercero en la primera vuelta del 10 de abril, Pedro Pablo Kuczynski, anunció por la mañana que respaldaría su candidatura en el ballottage del 5 de junio.
Los analistas ya habían pronosticado que los seguidores de PPK probablemente votarían por la hija del ex presidente condenado a 25 de prisión por violaciones a los derechos humanos y corrupción. No obstante, ese apoyo refuerza la figura de Keiko, cuya imagen negativa -atribuida en gran parte al gobierno de su progenitor- le impidió durante la campaña cosechar más adeptos.
El anuncio de PPK careció de elogios para Fujimori, pero logró similar resultado al criticar las propuestas económicas de su rival, Ollanta Humala. También cuestionó al Premio Nobel de Literatura 2010, Mario Vargas Llosa, quien realiza una intensa campaña a favor del líder nacionalista.
Pero el escenario volvió a emparejarse por la tarde, cuando el ex presidente Alejandro Toledo informó que la alianza que impulsó sus aspiraciones reeleccionsitas, Perú Posible, decidió respaldar "sin ambigüedades" a Humala.
Los especialistas habían hecho similares proyecciones respecto a sus electores, de quienes creían se inclinarían por el candidato de Gana Perú. La diferencia, sin embargo, reside en que mientras PKK tomó su decisión en el plano personal, la de Toledo partió de una resolución que adoptó el Comité Ejecutivo Nacional y las bases de su partido, lo que refuerza su carácter.
Acuerdos y condiciones
Pero si el consenso de una decisión partidaria favorece en principio a Humala, las especulaciones respecto al futuro de Toledo y PPK parecen beneficiar a Keiko. Aunque ambos negaron que existan acuerdos con los candidatos en competencia los matices fueron elocuentes en sus declaraciones.
"No hay ningún pacto de gobernabilidad y nada está condicionado para este apoyo", explicó Toledo al confirmar el respaldo a Humala. "No es un cheque en blanco", sentenció el ex presidente, quien en primera vuelta había advertido que avanzar hacia el nacionalismo sería "un salto al vacío".
PPK, en cambio, dejó abierta la puerta a una alianza de gobierno. Consultado por la prensa, admitió que estaría "encantado" de ser convocado por un eventual gobierno de Fujimori para desempeñarse como ministro
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