¡Feliz 2016!
Los habitantes de Kiribati y Samoa, en el Pacífico Sur,
estrenan el año 2016. +Fotos


Quince minutos después celebran el Año Nuevo las alrededor
de 600 personas que pueblan el archipiélago neozelandés de Chatham, situado a
unos 680 kilómetros al sureste de las islas principales de Nueva Zelanda.
A las 11.00 GMT llega el 2016 para el resto de habitantes de
Nueva Zelanda, Fiyi y Tonga.
Las autoridades neozelandesas han ornamentado los edificios
más emblemáticos del país para la ocasión y algunos, como el Sky Tower en
Auckland, una torre de 328 metros de altura, ofrecerá durante la Nochevieja
cuatro horas de actuaciones, incluidos rayo láser y fuegos artificiales.
La mayor parte del territorio australiano celebra el Año
Nuevo a las 13.00 GMT.

Sídney, en la parte oriental del país, ha introducido por
primera vez la tradición aborigen de los pueblos cadigal, gamaragal y wangal
como tema central de estas celebraciones.
El histórico puente de la bahía de Sídney, que enlaza el
centro financiero con la costa norte, creará una cascada roja y una bandera gigante
aborigen gracias a un artificio de luces diseñado especialmente para la
ocasión.
Las autoridades locales esperan que más de un millón de
personas asistan al espectáculo que comenzará varias horas antes de la
medianoche.
En las siguientes horas, el resto de Australia y el Sudeste
Asiático despedirán el 2015 y festejarán el nuevo año.



Una hora más tarde entrará el nuevo año en Indonesia,
Camboya, Tailandia y Vietnam.
En la capital vietnamita, se ha organizado entre otras
muchas una celebración especial (Yamaha ClearMen Countdown 2015) en la plaza
Cach Mang Thang, frente al edificio de la Ópera de Hanoi.
Aunque los budistas birmanos, camboyanos, laosianos,
tailandeses y vietnamitas celebran su Año Nuevo en fechas distintas, también
conmemoran la Nochevieja del calendario gregoriano.
Sin embargo, en este momento, todos los grandes
protagonistas de la escena mundial parecen sentir incertidumbre e incluso
temor. La única excepción parcial que yo encontré este año fue India, en donde
la élite empresarial y política todavía parecía estar impulsada por el
entusiasmo reformista del primer ministro Narendra Modi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario